Entradas archivadas en Varios

¡Gracias… y día 31!

Todos los años, cuando acaba el mes del reto, dejo que pasen unos días (más que nada para que descansemos todos un poco: yo, de escribir; vosotros, de leerme) y luego publico una entrada para daros las gracias porque vuestra participación en este experimento siempre es increíble. Este mes de abril no ha sido para menos: ha habido muchos comentarios y muchas menciones en Twitter (por cierto, para el próximo reto creo que voy a prescindir de Twitter, que esta vez me he vuelto tarumba y hemos vuelto loco a un tal @mobas al que le mandabais menciones y que, la verdad, entre nosotros, ya podía darme el nombre, que no tuitea). Y, sobre todo, ha habido muchas visitas. Muchísimas. Básicamente, el blog duplica sus visitas en estos días. Y hay días que incluso las cuadruplica… Y os aseguro que no sois dos o tres precisamente: hay veces que esto me da auténtico vértigo.

Así que, un poco antes que otros años (no os he dejado descansar mucho de mí esta vez), ¡¡muchísimas gracias!! Hacéis que todo el trabajo merezca muchísimo la pena. Y es una gozada encontrarse a otros lectores, con gustos muy diversos, cada uno de su padre y de su madre, y todos jugando a buscar algún título que encaje con el criterio de ese día… Y, no sé vosotros, pero ¡yo saco muchísimos títulos para leer después! Me esperan unos meses interesantes por delante, en parte con títulos que me habéis propuesto (de hecho, uno de los libros que estoy leyendo ya ha salido de este último reto).

El asunto está en que no he dado por terminado el reto. ¿Por qué? Porque me encantan los juegos y si, además, se meten libros en la ecuación, no sé decir que no. Y, claro, me proponen una nueva categoría para un día 31… ¡y me lanzo sin pensarlo! Así que, va a haber un día 31 propuesto por LV. Creo que es la categoría más difícil y personal de los tres retos: el libro que mejor (crees que) te representa. ¡Es complicadísima! Llevo pensando en esto más de tres semanas (desde el momento en que me lo propuso L.).

¿Y cuándo vamos a buscar los nuevos títulos? Pues el martes 7 de mayo. Por dos razones: una práctica y otra egoísta y jeta por mi parte… La práctica es que calculé que necesitaba una semana desde el último día «oficial» del reto para que me diera tiempo a escribir la nueva entrada (ando liadilla estos días y me pega que me va a llevar bastante; es que es muy difícil). La egoísta es que el día 7 es mi cumpleaños y no se me ocurre una fecha mejor que mi propio día para hablar de mí (admito llamadas, felicitaciones y regalos, por cierto; de hecho, me hacen muchísima ilusión). 😉

Y luego ya, sí, se acabó el tercer reto. Y las entradas muy personales (que, como me dijo alguien en Twitter el otro día, no puedo «amarillear» el blog). Pero, eso sí, habrá un cuarto reto. No sé cuándo, pero lo organizaré. De hecho, ya tenemos un montón de categorías pensadas (estáis de un inspirado todos últimamente…). Y, por supuesto, si se os ocurre cualquier otro juego o experimento que podamos montar en el blog, contactad conmigo, que liarme es bastante fácil…

Pues esto es todo lo que os quería decir hoy. De verdad, de todo corazón, ¡muchísimas gracias! Espero que lo hayáis disfrutado y os hayáis divertido buscando libros. Y, por supuesto, os espero el martes. Porque vosotros sabéis mucho de mí, pero a mí también me gusta saber de quienes me leéis, así que ver vuestros títulos va a ser interesante. Tenéis cinco días para pensar, ¡no me falléis! ¡Nos leemos el martes!

Reflexiones (XXIX)

«¿Lo que más admiro de un escritor? Que maneje fuerzas que lo arrebaten, que parezcan que van a destruirlo. Que se apodere de ese reto y disuelva la resistencia. Que destruya el lenguaje y que cree el lenguaje. Que durante el día no tenga pasado y que por la noche sea milenario. Que le guste la granada, que nunca ha probado, y que le guste la guayaba, que prueba todos los días. Que se acerque a las cosas por apetito y que se aleje por repugnancia».

José Lezama Lima
(1910-1976)
Escritor

El inglés de Urdangarin

Ayer Patricia Lluberas me pasó un artículo (que enlazo abajo) de un blog de El País cuyo autor analiza, no sin cierta mofa, el inglés de los correos electrónicos de Iñaki Urdangarin. No tiene desperdicio: así acabamos la semana con risas…

Estoy ‘sementaleando’ tu propuesta.

¡Buen fin de semana!

La frase del fin de semana

BCiIU-gCcAAom80.jpg-large

 

Nada más que añadir. ¡Feliz fin de semana a todos! 🙂

Leer por obligación

Aunque este tema de leer por obligación ha salido alguna vez a relucir por el blog (sobre todo, en comentarios o cuando yo he contado que he leído algún libro que no me gustaba para alguna asignatura en la carrera), nunca le he dedicado una entrada. Y el tema tiene su miga, porque a todos, en el colegio, nos han hecho leer por obligación. Y no siempre libros que nos gustaran o que pudieran encajar en nuestro mundo. Y, sinceramente, estoy empezando a pensar que es peor el remedio que la enfermedad…

La otra tarde llamé por teléfono a una de mis mejores amigas, profesora de Lengua y Literatura en ESO para más señas, y me dijo que había estado preparando un «control de lectura». Solo la expresión me chirría… Control de lectura. Para mí, prácticamente es un oxímoron. Y me comentó lo mucho que les cuesta a algunos alumnos leer las lecturas propuestas, porque son muy ajenas a sus intereses…

¿Por qué se les obliga a los chavales a leer? Yo soy una firme defensora de que se debe leer por placer, siempre. Lo que se quiera. Lo que más rabia dé en ese momento. Leer por ocio, por curiosidad, porque apetece… y no porque nos han mandado tal o cual libro. ¿Qué sentido tiene leer ciertos clásicos medievales, por poner un ejemplo que nos puede resultar familiar a todos, en la adolescencia? Muchos estaréis pensando que, si no, no leeríamos jamás a los clásicos. No estoy de acuerdo: se acercarían a ellos quienes sintieran interés, que es como se debe llegar a estas cosas. Leer por obligación me parece un error. Pero confieso que tampoco tengo otra solución (se me antoja complicado dar clases de Literatura sin lecturas; aunque, claro, tampoco entiendo que el estudio de la Literatura se limite, prácticamente, a la historia de la Literatura y no a otras ramas, quizá mucho más interesantes y útiles para todo el mundo).

Siempre que hablo de este tema recuerdo los derechos del lector de Daniel Pennac (os enlazo a uno de los primeros artículos de este blog donde ya hablaba de ellos, porque no puedo estar más de acuerdo con él). El primero es el derecho a no leer. Acabáramos. Si nos «obligan» a leer, están mermando nuestros derechos como lectores, yo lo veo clarísimo. Y si a la obligación de leer le añadimos que los títulos propuestos no siempre son los más acertados, lo único que estamos consiguiendo es crear no-lectores. Muy triste.

No siempre la culpa es de los profesores de Literatura, que conste. Por ejemplo, mi amiga está haciendo un gran esfuerzo por recomendar lecturas que puedan ser del interés de sus alumnos. De hecho, os pido vuestra colaboración desde aquí para le propongáis libros (yo ando muy pez en LIJ ahora mismo). Eso sí, a la dificultad de recomendar títulos para chicos de unos 14 años (por cierto, aviso a navegantes, lo del título que recomendarías a un adolescente será una de las categorías del próximo reto), se le une el hecho, en este caso, de que trabaja en un colegio con un ideario religioso muy estricto, que dificulta aún más la elección pues no puede recomendar nada que se aparte de ciertas ideas ultracatólicas. Si sabéis de algún libro que pudiera encajar y que les vaya a gustar a los alumnos… ¡os lo agradeceríamos!

Sé que este tema da para mucho y que podríamos tener animadas discusiones al respecto. Pero prefiero dejarlo aquí por el momento. Eso sí, si queréis mostrar vuestra opinión (sea cual sea), tenéis los comentarios a vuestra disposición…

Reflexiones (XXVIII)

«Lo más fácil sobre la faz de la tierra es no escribir».

William Goldman
Escritor

Mentalizándome para mi charla de mañana… Además, con cita del autor de La princesa prometida (uno de los libros que estoy leyendo ahora mismo).

Planes para el blog

El año pasado me propuse publicar tres entradas semanales en el blog. Cumplí solo a temporadas… ¡Mal asunto! Así que me prometí a mí misma que, este año, sí: este año iba a publicar al menos tres artículos todas las semanas. Y volver un poco a la ortotipografía y la sintaxis, que últimamente parece que he renegado de estos temas… Vale, pues no. Este año tampoco va a ser. Y no solo porque ya he fallado en enero…

¿Por qué voy a dejar medio abandonado de nuevo el blog? Pues porque me han ofrecido un proyecto increíble de trabajo que me va a llevar (creo) muchísimo tiempo. Fue la gran sorpresa del viernes. De hecho, me he pasado el fin de semana reorganizando mi vida laboral para poder acabar cosillas pendientes y empezar ya con mis nuevas tareas. Es un auténtico caramelo de trabajo, que, además, podría ser un auténtico filón de entradas para el blog una vez que esté acabado. No puedo contar mucho más. Solo diré que estoy muy contenta, a pesar de que esto puede que suponga cambios importantes en mi forma de trabajar: para empezar, ¡voy a tener un compañero, cosa que no ocurría desde hacía muchísimos años!; y es posible que no siempre pueda trabajar en mi despacho (pero eso al blog le puede venir bien: muchos viajes a Bilbao suelen suponer muchas lecturas y, quizá, muchas reseñas). Desde luego, las llamadas de estos días han supuesto una inyección de autoestima profesional brutal, y estoy ilusionada y con muchas ganas de aprender todo lo que pueda, porque lo que es innegable es que voy a aprender muchísimo…

Aun así, y a pesar de que esto es muy bueno para mí, me da un poco de rabia. El blog siempre me ha traído cosas increíbles y no me gusta tener que sacrificarlo siempre. Además, tenía muchos planes. Porque, por ejemplo, estábamos organizando otro reto de los 30 libros (era para ¿abril?). De hecho, ya tenemos unas 20 categorías nuevas pensadas (si se os ocurre alguna, hacédmelas llegar, ¡por favor!), pero es que ahora… ¡no sé si me daría tiempo a organizarlo! Lo intentaré (en algo más de dos meses, me tiene que dar tiempo a escribir alguna entrada del reto), pero lo veo complicado. Si no, lo dejaré para más adelante, pero habrá reto en algún momento del año. (Así que, por favor, ¡dadnos ideas!). Dejad propuestas de categorías en los comentarios si queréis…

De todas formas, tengo ya reseñas en la recámara (esta semana publicaré una de un libro que me ha gustado muchísimo y que me ha dejado con muchas ganas de seguir investigando al autor, ¡un gran descubrimiento!), así que tampoco es que vaya a desaparecer del todo (¡ni mucho menos!). Y podéis seguir contactando conmigo por las vías habituales (correo electrónico, Twitter, los comentarios del blog…). Y, por supuesto, en cuanto pueda, ¡volveré con muchas entradas!

Ortografía elemental

Qué, quién, cómo, cuándo, dónde y por qué llevan tilde cuando se les puede añadir cojones justo después. De nada.

Visto en Twitter y copiado tal cual… Gran verdad…

😉

¿Te atreves a soñar?

Hoy me marco un off topic para dejaros un vídeo que me mandaron el otro día y que, creo, merece la pena… ¡Los dibujos son una auténtica chulada! ¡Feliz lunes a todos!

¿Te atreves a soñar?

En 2013…

«Espero que tengas un año maravilloso, que sueñes arriesgándote exageradamente y que hagas algo que no existiera antes de que tú lo hicieras; que te amen y te admiren, y que tengas a quien amar y admirar. Y, lo más importante (porque creo que debería haber más bondad y sabiduría en el mundo ahora mismo): que, cuando lo necesites, seas sabio, y que siempre seas bondadoso».

Neil Gaiman
Escritor

Empezamos 2012 con un deseo de Neil Gaiman y no ha ido mal, así que este año repetimos… De nuevo suscribo todas sus palabras. ¡Feliz año 2013 a todos!



Copyright © 2009–2015. Todos los derechos reservados.

Canal RSS. This blog is proudly powered by Wordpress and uses Modern Clix, a theme by Rodrigo Galindez modified by Arturo Martín.