‘Zorionak’

Este fin de semana he estado de celebración de cumpleaños varios (entre ellos, el mío, que es el miércoles 7: por supuesto, acepto regalos y felicitaciones…, ¡me pirra mi cumple!). Y a alguien se le ocurrió preguntarme por el origen de zorionak, palabra que todos los vascos conocemos muy bien, pero que, por si acaso, os cuento al resto que sería el equivalente del felicidades castellano. Y he decidido escribir la chapa que les solté el otro día en el blog, sitio mucho más adecuado para estas historietas sobre etimología que tanto me gustan.

Zorionak, en realidad, sería zori onak, es decir, ‘buenos pájaros’ (luego puntualizo el zori). El concepto tendría su origen en la antigua creencia de que los pájaros eran portadores de buenos o malos augurios. De hecho, la ornitomancia, o adivinación por medio de los pájaros, era muy habitual entre los antiguos griegos. Los pájaros, con su vuelo y sus gritos/cantos, revelaban la voluntad de los dioses. Los adivinos se valían de si las aves volaban alto, bajo, hacia derecha (diestra) o izquierda (siniestra), en bandadas o solos, si chillaban o no… para predecir el futuro.

La ornitomancia no era exclusiva de los griegos, sino que muchos pueblos de la Antigüedad la practicaban (por estos lares era algo muy habitual). También, cómo no, los romanos (de hecho, parece que el lugar exacto de fundación de Roma se fijó por el vuelo de unos buitres), quienes la extendieron por todo su Imperio (por cierto, un referente actual que se hace eco de esta época y de este asunto de las aves como presagios, Astérix y Obélix: Panorámix, el druida de la aldea gala, también se fija en los pájaros para sus predicciones).

Y hay multitud de pasajes en la literatura que reflejan esta práctica. Por ejemplo, en el Cantar de Mío Çid, la corneja vuela a diestra cuando salen de Vivar, y a siniestra cuando llegan a Burgos (es decir, mal rollo). Otro día hablamos de la derecha y la izquierda, y sus significados, que es un tema curioso.

Vamos con la palabra zori, que la he dejado sin explicar. Pájaro se dice txori y su origen sería así: txori < xori < zori. Y zori provendría de sors, ‘suerte’. Es decir, que el nombre de los pájaros tiene ya que ver con su capacidad de presagiar hechos (curiosamente, pasa exactamente lo mismo en griego). Otro vocablo vasco con esa misma raíz y que tiene que ver también, lógicamente, con esos augurios: sorgina (‘bruja’). Vendría de sors + egin, es decir, ‘quien hace la suerte’, ‘quien echa suertes’, esto es, ‘adivina’ o ‘bruja’ (significado actual).

Todo este rollo era para contaros que los vascos, en realidad, nos deseamos buenos augurios y buena suerte (que, supongo, traen felicidad: todo está relacionado) cuando nos decimos zorionak. Así que, «buenos pájaros» a todos los que cumpláis años estos días (que somos plaga). Y, a todos, tenéis los comentarios para contar lo que queráis.