‘Enero’

Se me ha ocurrido que podría ser una buena idea aprovechar los primeros días de cada mes para explicar el origen de su nombre. Así que, empezamos con enero.

Enero nos llega del latín januarius, en concreto de su forma vulgar jenuarius: januarius> jenuarius > enero. Significa ‘mes de Jano’. ¿Y por qué se le dedica al dios Jano el primer mes del año?

Jano era un dios con dos caras que miraban a ambos lados de su perfil. A él se consagraban las puertas, los comienzos y los finales. Precisamente por ser el dios al que se le consagraban los comienzos (la primera cara mira «al inicio»), existía la tradición de invocarle el primer día del mes. Cuando en la Edad Media se pasó del calendario de diez meses al de doce, se decidió que fuera enero el primero del año.

Conviene recordar que los meses del año se escriben en minúscula.