Tendencia a alargar las palabras

Existe, hoy en día, una tendencia exagerada a alargar palabras mediante el empleo de sufijos. En ocasiones pensamos que cuanto más largas y complejas sean las palabras de nuestro discurso, este parecerá más culto. No obstante, muchas veces conseguimos el efecto contrario: un texto excesivamente pedante y recargado.

A continuación tenéis una lista de palabras que, aunque no son incorrectas, deben utilizarse con cautela y sin abusar de ellas:

  • Influenciar por influir.
  • Culpabilizar por culpar.
  • Paralización por parálisis (en determinados contextos).
  • Posicionamiento por posición.
  • Concretizar por concretar.
  • Intencionalidad por intención.
  • Regularización por regulación.
  • Peligrosidad por peligro.