Entradas archivadas en Varios

Cuestionario sobre libros

Otro más. Me ha llegado este cuestionario sobre libros por correo electrónico, pero creo que ha estado circulando por varios blogs, así que me imagino que es un meme. Lo contesto y, si os apetece, lo respondéis vosotros también, en los comentarios o en vuestras propias bitácoras (eso sí, ¡dejadnos la dirección para que podamos leer las respuestas!). Por cierto, como es muy largo, lo haré en dos tandas (la semana que viene, la segunda parte).

No sé dónde se originó el cuestionario; si alguien lo sabe, que por favor me lo indique para que pueda darle al César lo que es del César…

1. ¿Cuál es la obra que más veces te has leído?

Ya os he comentado más de una vez mi enganche con Buenos días, tristeza. Creo que ese es el título que más veces he leído (aunque tengo que reconocer que este verano he fallado).

2. ¿Cuál es el último libro que te has dejado a medias?

Tengo a medias Soy un gato de Sõseki, aunque sí tengo intención de acabarlo. Dejé sin acabar Cuatro hermanas de Jetta Carleton y no tengo ninguna intención de retomar su lectura.

3. ¿Qué te suele llevar a preferir una lectura en vez de otra?

No sigo un criterio fijo para elegir mis lecturas. A veces me dejo guiar por reseñas de gente que conozco o de blogs que veo que, más o menos, pueden valorar los libros de la misma forma que lo hago yo. Si alguien de mi familia (bastante lectora) me recomienda algo, pues también lo devoro. Me gusta mucho pasearme por librerías, veo programas de libros en la televisión, leo muchos blogs sobre libros (y alguna revista también cae de vez en cuando). Al final, con todo, te haces una idea de lo que te vas a encontrar y te puedes guiar por tu gusto personal.

4. ¿Recomiendas libros con frecuencia? ¿Qué libros recomiendas más?

Sí suelo recomendar libros, pero sugiero cosas muy diversas en función de los gustos de la persona que me esté preguntando.

5. ¿Cuál fue el último libro de poesía que leíste?

No suelo leer poesía, pero me gustan mucho (y los releo a veces) el Cántico espiritual de S. Juan de la Cruz (una auténtica joya), los Veinte poemas de amor y una canción desesperada de Neruda (me parece que tienen una fuerza increíble), las Nanas de la cebolla de Miguel Hernández (por lo que significan) y un librito de García Lorca que se llama El diván del Tamarit y que me gusta mucho más que sus obras más famosas.

6. ¿Cuál es tu momento preferido del día para leer?

Me encanta leer los fines de semana nada más despertarme, en la cama bien tapada. Normalmente, entre semana leo por la noche.

7. ¿Recuerdas el primer libro «serio» o adulto que leíste?

Pues la verdad es que no, no lo recuerdo.

8. ¿Te gusta ir al teatro? ¿Y leer teatro?

Sí que me gusta ir al teatro. Ver, por ejemplo, a Lola Herrera representando Cinco horas con Mario no tiene precio. Ahora, a veces, he visto producciones que no me han gustado nada y no entiendo la obsesión de algunas compañías por provocar al público sí o sí (habrá obras que inviten a esa provocación y otras que no). En cuanto a leer teatro, obviamente no es lo mismo, pero sí lo hago a veces.


Comienza el nuevo curso

Ahora sí que sí. Cabalgamos de nuevo. Había decidido que el arranque oficial tras las «vacaciones» iba a ser en septiembre, pero hay ocasiones en que es complicado luchar contra fuerzas externas que ponen todo cuesta arriba. Así que, empezamos de nuevo justo después de mis verdaderas vacaciones.

Unas vacaciones que se me han hecho excesivamente cortas; sinceramente, estoy agotada. Supongo que ahora, al entrar en la rueda de nuevo, volverá la energía, porque estoy totalmente desinflada. Eso sí, los días en Inglaterra, a pesar del frío que hemos pasado, han sido geniales. ¡Me gusta muchísimo Inglaterra! Y ahora que, además de las habituales, tengo una poderosa razón para ir, creo que no tardaré mucho en volver.

Por lo demás, el blog vuelve a su rutina. Y, como siempre, las preguntas: ¿echáis algo en falta?, ¿hay algún tema que queréis que trate?, ¿alguna duda? Os recuerdo también que tenéis a vuestra disposición los comentarios, la dirección de correo electrónico del blog, el Formspring… Y si alguien quiere participar en la bitácora como firma invitada, que se ponga en contacto conmigo, será más que bienvenido. Arrancamos…

Reflexiones (IV)

«El novelista nunca debe sentirse satisfecho con lo que hace. Lo que se hace nunca es tan bueno como podría ser. Siempre hay que soñar y apuntar más alto de lo que uno sabe que puede apuntar. No preocuparse por ser mejor que sus contemporáneos o sus predecesores. Tratar de ser mejor que uno mismo. Un artista es una criatura impulsada por demonios. No sabe por qué ellos lo escogen y suele estar demasiado ocupado para preguntárselo. […] Uno tiene que aprender a través de sus propios errores; la gente solo aprende a través del error».

William Faulkner
1897-1962
Escritor

Gracias, Telefónica

Gracias, Telefónica o Movistar o como te llames ahora, por hacer de esta última semana un infierno. Gracias por no permitirme preparar entradas en condiciones para estos días y para los que vienen. Gracias por permitirme poner quejas inútiles, que no sirven absolutamente de nada. Gracias por hacer que el blog parezca abandonado.

No sé cuándo se van a dignar a arreglar mi problema. Lo único que sé es que mañana me voy de vacaciones y esto se queda al menos diez días sin entradas. Miento, creo que habrá un artículo el martes, pero eso será todo. Lo siento. No era lo que yo había planeado. Pero bueno, volveré.

Ahora me voy a olvidar de Internet, de Telefónica y de todos los problemas, y me voy a concentrar en Londres, Canterbury y la campiña. Inglaterra me espera. Nos leemos a mi vuelta.

Dificultades técnicas

Llevo desde ayer por la mañana sin Internet en casa y, como no había nada programado para hoy, no puedo publicar un artículo en condiciones (¡esto lo estoy escribiendo con el móvil!). No se puede luchar contra los elementos… A ver si lo arreglan pronto y puedo volver a mi rutina. 😉

Sugerencias de lectura

Hoy, a pesar de que es domingo y suelo dedicar el día a la reseña de un libro, he decidido que no voy a hablar de ninguna novela y os voy a pasar la pelota a vosotros. Hoy os pido que compartáis conmigo vuestras sugerencias de lectura

¿Habéis leído algo este verano que os haya llamado la atención? ¿Habéis descubierto algún libro que merece la pena? No importa si los libros son actuales o tienen ya muchos años a sus espaldas: si os han gustado, son bienvenidos. Yo agradezco todas las sugerencias que me hacéis.

También podemos darle la vuelta a la tortilla: si hay algo que no os ha gustado, que os ha defraudado, que no ha cumplido vuestras expectativas… contádmelo también. ¡Los comentarios son vuestros!

Y, por supuesto, si alguien se anima a escribir alguna reseña, mejor que mejor. Solo tenéis que mandármelas a la dirección de correo electrónico del blog (la tenéis en la columna de la derecha) y las publicaré cuanto antes…

‘Historia de un letrero’

Me acaba de llegar esto por correo electrónico y no me puedo resistir a compartirlo con vosotros. Una corrección de estilo en toda regla… 😉

Historia de un letrero

Estrés

Lo siento. Prometí en la última entrada al menos tres artículos semanales y, a la primera de cambio, fallo en el intento. El problema es que estoy desbordada: quiero hacer mil cosas y no llego. Y el blog, entre otras cosas, lo está sufriendo.

Pues sí, podría decirse que estoy estresada. Escrito así, con e inicial. De hecho, estrés está admitido por la RAE (junto con estresar y estresante). Su significado es ‘tensión provocada por situaciones agobiantes y que origina reacciones psicosomáticas’, que es justo lo que me está pasando (tengo problemas hasta para dormir, porque me despierto sobresaltada pensando en todo lo que tengo pendiente). Una curiosidad más sobre la palabra estrés: su plural es estreses, aunque suene a rayos.

Esta semana sí que voy a intentar escribir algún artículo. Palabra de correctora estresada…

Publicar o no publicar en agosto

Postear

'Postear' o no 'postear', esa es la cuestión. El dilema del bloguero

Perdonad que hoy no trate ningún tema referente a la lengua o la corrección, pero quiero centrarme en algunas cuestiones propias del blog, para manteneros informados de todo lo que ocurre y de las decisiones que voy tomando.

En las últimas semanas, ha habido un pequeño bajón en las visitas al blog. No es importante y, en julio, apenas ha sido perceptible; pero agosto es otro cantar y sí se nota que hay menos gente conectada. Al principio pensé que quizá los artículos no estaban interesando, pero, por lo que estoy viendo a mi alrededor, creo que las vacaciones tienen bastante más que ver con el menor número de visitas. Y, como la temporada vacacional de la mayoría de la gente está coincidiendo con una época de muchísimo trabajo para mí (estoy totalmente desbordada), he decidido espaciar un poco la publicación de los artículos. Eso me dará un poco de aire, porque, aunque no lo parezca, publicar un artículo diario conlleva su tiempo. Así que, durante el mes de agosto, va a haber menos entradas. No tengo decidido del todo si publicaré un artículo cada dos o tres días todavía, pero, bueno, me imagino que, como mínimo, podré ofreceros tres entradas semanales. En septiembre, a pesar de que entonces cogeré dos semanas de vacaciones, procuraré que el blog vuelva a su rutina de, al menos, un artículo diario (ya me las ingeniaré cuando me marche: dejaré todo programado y moderaré y contestaré los comentarios a mi vuelta). Así que, no os preocupéis, que todo volverá a la normalidad. No os imagináis lo mucho que necesito centrarme en otras cuestiones en este momento y, si además este tiempo coincide con una época en que se conecta menos gente, voy a aprovechar.

Por supuesto, que vaya a haber menos entradas no significa que no vayamos a trabajar. Además de los tres artículos semanales, vamos a tocar mucho las tripas del blog (espero poder explicaros las novedades muy pronto). Nuestra idea es hacerlo más funcional, que haya cabida para la participación y que dejar las dudas sea más sencillo aún. También aprovecharé, en la medida de lo posible, para empezar a organizar algo que tiene que ver con el blog y que verá la luz dentro de unos meses. Siento no poder dar más pistas de momento, pero sería estropear la sorpresa (todo a su debido tiempo).

Así que, ahora más que nunca (dada mi falta de tiempo para el blog), si queréis ayudarme a escribir alguna reseña como firma invitada, sois bienvenidos. Y, cómo no, podéis seguir dejando vuestras dudas y cuestiones (lo único, que tardaré más de la cuenta en responder).

A los que estáis de vacaciones, disfrutadlas mucho (¡aprovechad para leer un montón!); a los que no, pensad que, como este mes todo está a medio gas, seguro que el ritmo de trabajo es más tranquilo. Yo, por mi parte, voy a acabar varios libros que tengo pendientes y, en septiembre, como solía decir mi padre, Dios proveerá… Eso sí, no os vais a librar de mí tan fácilmente. Seguiré dando guerra (aunque un poco menos). 😉

Ayuda: origen de la expresión ‘sin trampa ni cartón’

Hoy necesito vuestra ayuda (a ver si hay algún filólogo por ahí que sepa responder esta duda). No tenemos ni idea de dónde ha surgido la expresión sin trampa ni cartón. ¿Qué tiene que ver el cartón ahí? ¿Alguien lo sabe? ¡Iluminadnos, por favor!



Copyright © 2009–2015. Todos los derechos reservados.

Canal RSS. This blog is proudly powered by Wordpress and uses Modern Clix, a theme by Rodrigo Galindez modified by Arturo Martín.