Comillas
Os comenté hace algún tiempo que iba a escribir alguna entrada para explicar el uso de las comillas. En este primer artículo de la serie (van a ser unos cuantos), voy a exponer los tipos de comillas que hay y reglas ortotipográficas generales sobre las comillas. En los siguientes, nos centraremos en el uso de cada uno de ellos.
En castellano existen tres tipos diferentes de comillas. En primer lugar tenemos las latinas, españolas, angulares o de pico (se conocen por todos estos nombres), que, como podréis imaginar, son estas: «xxx». Después, las más utilizadas (aunque no del todo correctamente), son las inglesas o dobles: «xxx». Y, por último, tenemos las comillas simples: ‘xxx’.
Las comillas se escriben pegadas a la primera y última palabra del período que enmarcan.
Lo puedes encontrar en el capítulo « Intrahistoria y costumbrismo ». ×
Lo puedes encontrar en el capítulo «Intrahistoria y costumbrismo». √
Cuando lo que va entrecomillado constituye el final de un enunciado o texto, debe colocarse punto detrás de las comillas de cierre incluso si delante de las comillas va un signo de interrogación o exclamación:
Me dijo: «La semana que viene me cojo vacaciones.» ×
Me dijo: «La semana que viene me cojo vacaciones». √
Me dijo: «¡Qué bien se come en este restaurante!» ×
Me dijo: «¡Qué bien se come en este restaurante!». √
Esto último es una norma relativamente reciente de la RAE, porque la tradición ortotipográfica española sigue una regla distinta. Pero la RAE aquí no deja dudas y su sistema es mucho más sencillo que el marcado por la tradición (que no explico, porque no merece la pena, solo conseguiría liar las cosas), así que se debe emplear como en los ejemplos anteriores.
Continuará…
Buenos días, Mónica,
Llevo un rato mirando mi teclado y no encuentro las comillas castellanas. ¿Estoy en lo cierto, o es que no veo tres en un burro?
Besos,
Vero