‘Inmundo’
El otro día me preguntaron por el significado del término inmundo y si tenía algo que ver con mundo. Habían intentado montarse una teoría sobre la suciedad (os recuerdo que inmundo quiere decir ‘sucio’) y el mundo en que vivimos que, tengo que reconocer, tampoco estaba del todo mal. Pero casi prefiero contaros bien de dónde viene.
Inmundo, como he dicho, significa ‘sucio’; viene del latín y está formada por el prefijo negativo in más el sustantivo mundo (del latino mundus). A pesar del origen latino, en realidad debemos ir a Grecia para entender bien el concepto. El concepto del mundus latino se corresponde con el kosmos griego. Tanto el kosmos como el mundus son el mundo, pero siempre siguiendo un orden. Es un universo ordenado. Ese orden es armónico, bello. El mundus es lo que se corresponde con la belleza ordenada, lo puro, lo limpio, lo perfecto. ¿Qué pasa con lo que no es mundus, lo que es inmundus? Que carece de esa belleza, de ese orden, de esa perfección, de esa limpieza. Es lo sucio, lo desagradable. De ahí viene el concepto de inmundo.
Con la llegada del cristianismo, el concepto cambió un poco. Si en el mundus latino (kosmos griego) cabían cielo y tierra, más adelante solo el cielo tiene categoría de bello, ordenado y perfecto; la tierra queda relegada a lo inmundo: es un lugar desagradable porque en ella hay pecado. Aun así, aunque cambia ligeramente el concepto, no lo hace el significado, pues lo inmundo continúa siendo lo sucio y desagradable.