Blog Mobas | El blog de las comas, los sustantivos, los libros y las cursivas

Tengo que hablar de Sin Novedad en el Frente. Lo leí a principios de este año tardíamente conmemorando los 100 años desde la 1ªG.M. Y vaya tela…Es tan tan triste y descorazonado y realista al mismo tiempo.
La verdad es que me encantó.

Aquí podría volver a referirme a La agonía de Francia, que ya utilicé en otra categoría, pero para no repetir voy a decir Trampa 22 de Joseph Heller, un clásico antibelicista ambientado en la Segunda Guerra Mundial, que además ha dado lugar a la expresión «catch 22» que en inglés indica las trampas administrativas o burocráticas de las que uno no puede escapar de ninguna forma. En el libro, la «trampa 22» se explica así:

“Sólo había una trampa: la Trampa 22, que especificaba que la preocupación por la propia seguridad en caso de peligros reales e inmediatos era sinómino de salud mental. ‘Orr’ estaba loco y podrían enviarle a casa por ello. Lo único que tenía que hacer era pedirlo; pero si lo pidiera ya no estaría loco y tendría que volar más misiones. Orr estaba loco si volaba más misiones y cuerdo si no lo hacía, pero si estaba cuerdo, tenía que volar. Si volaba en esas misiones, estaba loco, y no tendría que hacerlo; pero si se negaba, entonces estaría cuerdo, y entonces tendría que hacerlo. Yossarian estaba profundamente conmovido por la completa simplicidad de esta cláusula de la Trampa 22, y de jó escapar un respetuoso silbido.

“Menuda trampa, esa Trampa 22″, observó Yossarian.

“La mejor que ahí”, convino, el Dr. Daneeka.”

Egunon:
Lo de hoy me resulta fácil, porque en los últimos tiempos he leído varios libros con ambientación bélica ( de hecho, llegué a preocuparme un poco al darme cuenta), así que con tu permiso, daré un par de títulos, ambos de novelas estupendas:
«El sendero de los nidos de araña», la primera de Italo Calvino, basada en parte en su experiencia como partisano y » Largo domingo de noviazgo», de Sèbastien Japrisot (seudónimo de un tal Rossi), preciosa, en mi opinión, y mucho menos cursi de lo que presuponen algunos.
Que paséis todos un buen día…

Yo voy a escoger El juego de Ender, de Orson Scott Card. Leí toda la saga cuando era adolescente —que creo va ya por los once libros—, y releí este libro bastante más mayor. Me encantan sus matices en función de a qué edad lo leas. El concepto de guerra está a todos los niveles: hay una guerra política, más centrada en la oratoria, a nivel mundial, una guerra física contra una especie invasora, una guerra interior del protagonista por superar sus propias capacidades… así que creo que es bastante adecuado. Me acabo de dar cuenta de que hace mucho que no leo ciencia-ficción, tendré que buscar algo para la playa

Saludos.

Aprovecho que está cogida «Sin novedad en el frente». Era la primera opción que tenía. La leí este verano y me dejó con la boca abierta desde el primer párrafo.
Aprovecho, decía, para recomendar una novela que, aunque no lo parezca, transcurre en una guerra. Se titula «Una princesa en Berlín» y tiene una particularidad: está ambientada en Alemania, al final de los años veinte. La coloco aquí porque, aunque faltaban unos años para que comenzase «oficialmente» la segunda guerra mundial, al leerla se intuye que ese periodo de entreguerras era aún la guerra. Una especie de tregua entre la primera y la segunda. El mundo de la aristocracia, ajeno a la realidad, la vida de la gente en mitad de los cambios, los movimientos políticos y la apabullante, sorprendente… y real última parte del libro.
Un libro que intenta explicar que sólo hubo una única y larga guerra mundial.
Gracias .

Escuadra hacia la muerte, de Alfonso Sastre, me impresionó mucho.